Encuentros Visuales Urbanos es el nombre con el que defino mi estilo tras desarrollar ciertas características y principios.
Las fotografías actúan a modo de "habitaciones" donde respirar, observar, inspirarse, perderse, imaginar, pensar, desconectar, deleitarse con la estética de lo bello...
Son fotografías espontáneas, arrancadas de la más honesta realidad. Esta realidad está descontextualizada dado que el lugar donde se realizaron es irrelevante. Igualmente, con el color como aliado, posiciono al público en el momento presente, en el ahora.
Los máximos "retoques" que tienen algunas tomas son: el enderezamiento y el recorte. Defiendo una fotografía puray real. No hay manipulaciones del escenario antes de realizar la toma ni posteriores con programas. Es decir, no son bodegones.
Busco que el público se sumerja en la indagación de sus propios pensamientos, sentimientos y sensaciones que sólo la obra le inspira, evitando evocar sentimientos y recuerdos ajenos. Así se llega más fácilmente al deleite de observar experiencias ópticas y de admirar el trabajo de la fotógrafa al componer con los elementos allí presentes.
Mi objetivo, entre otros, es que espectadores y espectadoras sientan sorpresa al ver fotografías nuevas y refrescantes; se asombren al verse contemplando lo inesperado y descubran belleza en lo mundano e incluso en lo "antiestético".
Estoy escribiendo un libro-manifiesto sobre Encuentros Visuales Urbanos,
La evolución en mi trayectoria fotográfica a dado lugar a dos colecciones: "PALE" y "Lugares ausentes"